Descripción
A Bernardo de Ulloa se le considera el último representante del mercantilismo español. .
Su estudio de la situación económica de España es muy realista y minucioso. Su análisis es eminentemente empírico y las soluciones que propone también. Recomienda adoptar las medidas económicas llevadas a cabo por los países más desarrollados de su época: Inglaterra y Holanda.
Este autor centró el desarrollo económico de España en el fomento de la industria y el comercio. Éste era indispensable para llevar la riqueza a todos los sitios. Para resaltar la importancia del comercio, comparó la riqueza de una nación con la sangre del cuerpo humano.
Bernardo de Ulloa, al igual que otros autores españoles, consideró que el origen del decaimiento económico de España se encontraba en la gran afluencia de oro y plata de las Indias. La abundancia de dinero aumentó la capacidad de gasto de los españoles que aplicaron principalmente sobre los productos extranjeros más baratos y deslumbrantes que los españoles. La carestía de la vida en España era una de las principales causas del encarecimiento de sus productos, ya que los salarios no admitían reducción por estar ya al límite de la subsistencia.
Otros problemas eran un inadecuado sistema fiscal que gravaba excesivamente los artículos nacionales, el elevado costo de los transportes, debido a la pésima infraestructura viaria, fluvial y marítima y que las leyes prohibitivas de las importaciones resultaban ineficaces debido al contrabando.
En consecuencia, las soluciones tenían que basarse en la reducción de los costes de la producción nacional mediante reformas en la infraestructura, la estructura económica y el sistema fiscal
Respecto a la infraestructura, propuso la mejora de la red viaria terrestre, la construcción de canales, la mejora de la navegabilidad de los ríos y el fomento de la
Marina. En lo referente a la estructura, la rebaja de los salarios ayudaría a proveer subsistencias a bajo precio y el aumento de la producción a fomentar las industrias. La reforma fiscal debía ser no inhibitoria de la producción; así, las aduanas interiores y muchos impuestos indirectos tendrían que suprimirse, en especial los de ventas al por mayor, los que gravaban las materias primas (incluso las de importación) y los consumos intermedios. El proteccionismo arancelario de la industria nacional sólo debía afectar a los productos terminados de origen.
La obra contiene, además, una interesante historia del comercio y de la industria españoles a lo largo del siglo XVIII.
Muy raro y buscado. Última venta fue realizada en Christie´s el 20 de marzo de 2013 por 2.250 libras.
Bernardo de Ulloa