Descripción
En la tarde del día 21 de marzo de 1829 un fortísimo terremoto asoló gran parte de las localidades de de la vega baja del Segura produciendo numerosos muertos y heridos. Orihuela y Murcia, algo más alejadas, también percibieron espantosas sacudidas, con graves desperfectos en sus catedrales.
El 6 de julio de 1829 se anuncia en el Diario de la Ciudad de Valencia la publicación de una novela cuyo argumento se basa en “la desventurada muerte de unos amantes adornados de eminentes virtudes, víctimas de los terremotos de Orihuela”.
En menos de cuatro meses un autor anónimo había escrito, editado y distribuido la obra.
La novela abre con unos documentos oficiales que sobre el particular se publicaron y el argumento se inicia con un curioso remedo cervantino: «En un pueblo situado en la costa que hay desde Alicante a Cartagena, vivía no ha mucho un mancebo, llamado Henrique.
Carece de capítulos o partes. Todo el relato es una exposición ininterrumpida en la que destaca la explicación aristotélica de los sismos, aumentada con las teorías «explosiva» y «eléctrica», que fueron las que ya se esgrimieron cuando los sabios trataron de explicar el magno sismo de Lisboa, del siglo anterior.
A pesar de que en la portada no se identifica la autoría de la obra, ésta fue atribuida a Estanislao de Cosca Vayo que la debió escribir cuando solo contaba con 24 años.
Muy rara
Estanislao de Cosca Vayo