Descripción
Tras la muerte de su padre entra en un colegio jesuita donde conoce a José María Souvirón y José María Hinojosa, quienes le ayudan a fundar la revista Ambos (1923). Tres años más tarde, en compañía de Hinojosa y Emilio Prados, crea la revista Litoral (1926-1929), plataforma de difusión de la estética de los jóvenes creadores, ocupándose tanto de su edición como de la de los libros adjuntos, en el marco de la Imprenta Sur, de la que es socio. En dicha imprenta, junto a parte de las obras más emblemáticas de autores de su generación publica en 1926 su primer poemario “Las islas invitadas y otros poemas”. Es su primera antología y muestra una especial predilección por los temas naturalistas. El poeta hizo crecer este poemario con los años, como si de un organismo vivo se tratase, por lo que constituye la obra paradigmática de su poesía. Las sucesivas ediciones de esta obra (1936, 1944 y 1946) aumentaron la cifra de los poemas en ella incluidos hasta los definitivos 137, entre los que se encuentra la práctica totalidad de la primera época de su producción poética. Ésta se caracteriza por la espontaneidad, la claridad en la expresión y una extraña magia, con el amor como asunto central.
La edición de 1936 que ahora presentamos fue editada en la imprenta que junto con su esposa Concha Méndez tenía instalada en su domicilio particular de la calle Viriato de Madrid.
Manuel Altolaguirre