Descripción
Inició su carrera literaria próximo al ultraísmo, pero su principal obra, Morir al día, se situó en las antípodas de la vanguardia. Fue traductor de Proust, secretario de Unamuno, con una de cuyas hijas se casó y buena parte de su obra inédita se extravió tras su muerte.
La realidad reflejada se compone de 126 sonetillos escritos básicamente, entre 1951 y 1952 y los pude publicar, cuando ya no podía ver, en enero de 1955 gracias a la gestión en la distancia de Max Aub y Joaquín Díez-Canedo.
José María Quiroga Pla