Descripción
Poeta malagueño amigo de Aleixandre con precoces inquietudes sociales. Muy pronto se desplaza a Madrid para ingresar primero en la «Resi de peques», grupo experimental de niños a cargo de García Morente, y después en la Residencia de Estudiantes, donde conocerá a Lorca, Alberti, Buñuel, Dalí, así como a personalidades literarias que tuvieron en él gran influencia, como Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez.
La adversa acogida que tuvo su libro Vuelta por parte de Gerardo Diego le llevó a tomar la drástica solución de no publicar más. Así que Prados siguió escribiendo pero no quiso publicar sus obras, que iban tiñéndose de surrealismo. Al igual que a Lorca y Alberti, el nuevo lenguaje surrealista le va a servir a Prados para denunciar airadamente la situación de injusticia social y política que vivía España a finales de la segunda década del siglo X. Más tarde, con las tensiones republicanas, su voz se vuelve más comprometida que nunca llegando a una etapa de plenitud en la que se ve influenciado por ese surrealismo que asume un fuerte compromiso social, surgiendo libros como El llanto subterráneo en el que la denuncia no excluye una minuciosa elaboración y un alto grado de exigencia estética.
Al principio de la Guerra Civil se desplaza a Madrid para formar parte de la Alianza de Intelectuales Antifascistas, y comienza la propaganda activa, colaborando con El Mono azul. Por la radio lee poemas de aliento e incitación a la lucha.
Sus romances se harán tan populares que no sólo serán recitados por los soldados republicanos, sino también imitados por otros muchos poetas.